Bailar para reír, reír para bailar

 

Una de las mejores maneras para mantenerse en forma, facilitar el movimiento muscular y disfrutar de una buena terapia, tanto para el cuerpo como para el alma.

 

Conecta con tu feminidad, estimulan la región pélvica a través de movimientos específicos, la zona abdominal y la respiración ¡Muchos ginecólogos la recomiendan!

 

Se trabaja también como terapia mental, entrar en contacto con el propio cuerpo, expresarse con él... despierta el amor propio y fortalece tu autoestima.

 

Una práctica constante ayuda a corregir la postura, aumentar el poder deconcentración, trabajo de memoria mediante la creación de coreografías...